Clara Peeters y la doble dificultad.

Hace algunos años, una alumna de mis cursos de pintura y dibujo me preguntaba con una mezcla de curiosidad y cierto espíritu reivindicativo el por qué de la escasa presencia de la mujer en el Arte a lo largo de la historia. La charla tenía lugar durante una de las clases y al poco de empezarla los lápices, carboncillos y pinceles se aparcaron para pasar a un debate abierto en el que participaron gustosamente el resto de alumnos, unas veces aportando razones y argumentos históricos y otras sencillamente llevando el tema a un plano más social y político, haciendo hincapié en la desigualdad de oportunidades que históricamente la mujer ha tenido para desarrollarse en Arte (¿acaso no cultural, política y laboralmente también?).
No voy a repetir aquí aquel debate, reflexione cada uno sobre la cuestión, si así le parece. Personalmente creo que, independientemente del genero, es fundamental tener unas capacidades artísticas innatas para poder hacer grandes obras de arte, pero igualmente pienso que si no hay un entorno mínimamente adecuado que permita florecer esa creatividad, las dificultades pueden asfixiar ese talento, y aquí enlazo, es obvio que durante siglos la mujer no sólo no tuvo las mismas oportunidades sino que directamente éstas le fueron vetadas.
Lejos de pretender hacer una proclama sobre el tema, vengo hoy a presentaros la figura de Clara Peeters, extraordinaria artista que superó la doble dificultad de ser artista (casi siempre una aventura) y serlo siendo mujer en su época. Una excepción dentro de las reglas sociales.
Nada que añadir sobre su obra que, como siempre, es mejor verla y, si es posible,  mejor aún al natural que en fotografía.
Os dejo también un enlace a un interesante artículo que sobre ella se ha publicado en el suplemento dominical de El Pais el 23 de Octubre de 2016.
Que lo disfrutéis.
Hasta la próxima.

Enlace al artículo en EL PAIS Semanal: Pulsa AQUÍ.